Proyección

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Paradójicamente la soledad destaca la compañía de gritos, gruñidos y murmullos de voces que rozan lo extraño... voces que hablan de cadáveres abatidos al fondo de abismos filosos, de cráneos aplastados por el peso de sus actos, de círculos de dolor perpetuo y de prisiones faltas tano de muros como de esperanzas de escapar... voces que no se van al cerrar los ojos...

Mis oídos me traicionan guiándolas a mí cada noche... algunas veces son piadosas y articulan solo palabras escondidas en ininteligibles mensajes, otras veces solo susurran sin mayor propósito que el mantenerme despierto...

Ahora apareces tú, te busco entre oscuros árboles de azulosas tonalidades... jugando te escondes entre la niebla... puedo sentir tu aroma... me guías a buscar mi reflejo en tus ojos sin darte cuenta...

En la oscura compañía de la Luna, la tinta fluye como sangre tiñendo las páginas del libro que solo ambos podemos leer, llena de una vida tan palpitante como eterna... como un acontecimiento extraordinario las voces deciden partir, develando dentro de mí miles de deseos profetizando que ya ha muerto mi última noche sin compañía...